11/09/2020
Se acabaron las vacaciones. La vuelta al trabajo, ya sea a la propia oficina o en modo teletrabajo, se nos hace siempre un poco cuesta arriba. Por eso es fundamental ser capaz de seguir desconectando.
Relajarse, buscar ese lugar para desconectar donde sentirnos libres del tiempo y las obligaciones. Encontrar ese rincón favorito; el espacio creado para conquistar el día con nuestros rituales preferidos: tomar un café, leer, charlar, escuchar música…
No hay que irse muy lejos para tomar distancia de lo cotidiano. Estamos aprendiendo, más que nunca, a romper rutinas con pequeños cambios, a disfrutar de los detalles más simples, a redescubrir lo más conocido. Una silla soleada o un libro sobre la mesa pueden ser el inicio de la perfecta desconexión. Y nuestra propia terraza el mejor escenario para ello.
El centro donde late la animación y donde se hacen realidad los mejores planes: cenar en buena compañía y cerrar el duro día de trabajo tranquilamente en familia; una tarde de música, una charla al anochecer, una divertida sobremesa o una puesta de sol… en esas horas en las que parece que se detiene el tiempo.
Sigamos disfrutando de esos momentos donde el mundo se para.
¡Feliz retorno!